- El objetivo de competitividad va a ser cada vez más difícil de alcanzar exclusivamente con estrategias obsesionadas por los costes y la eficiencia
- La empresa moderna se enfrenta a desafíos derivados de la necesidad de desenvolverse en mercados y sociedades donde coexisten múltiples grupos de interés
- Cobran fuerza otras capacidades intangibles como la reputación, la confianza, el compromiso de empleados, clientes y proveedores, la creatividad o la calidad
- Se están desarrollando estándares para la sostenibilidad, la RSE y la información corporativa no financiera y si bien inicialmente son estándares voluntarios, existe una intensa presión para que la regulación pública los imponga como modelos obligatorios
- Las empresas con perspectivas de futuro serán las que no obstaculicen el crecimiento sostenible en su triple vertiente: ambiental, social y económico
- Las empresas con mejores prácticas en sostenibilidad son empresas más competitivas, con un mayor crecimiento y, previsiblemente, con mayores índices de rentabilidad y supervivencia
- Es esencial que las iniciativas empresariales de inversión en sostenibilidad vayan acompañadas de la máxima transparencia informativa sobre sus acciones y resultados
- La cooperación público privada va a ser una línea de futuro para enfrentar los principales desafíos