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Consejos para su selección

Consejos para su selección


La sostenibilidad se ha convertido en un eje estratégico para impulsar la actividad de las compañías y cada vez son más las empresas que incorporan criterios ambientales, sociales y de Buen Gobierno (ESG por sus siglas en inglés) en sus decisiones de negocio. A este respecto, como hemos visto, el aprovisionamiento sostenible debe constituir un pilar fundamental a la hora de introducir los criterios de responsabilidad y sostenibilidad en la gestión de nuestra actividad empresarial.

Ello requiere de la evaluación de nuestros proveedores donde, además de criterios como la calidad o el precio, se consideren los criterios ESG (Ambientales, Sociales y de Buena Gobernanza) en el proceso de evaluación y homologación de los mismos.

Es por tanto importante saber qué criterios debemos considerar a la hora de evaluar la responsabilidad y sostenibilidad de los proveedores. Siempre teniendo en cuenta que la compra sostenible toma en cuenta criterios generales basados en la sostenibilidad a la hora de realizar una compra verde, tales como:

  • Reducir el volumen de las compras, tomando en cuenta si lo que vamos a comprar va a satisfacer realmente la demanda real.
  • Buscar alternativas que minimicen la explotación de los recursos naturales, utilizando productos de segunda mano, reutilizar, realizando intercambios, o reparando.
  • Asegurar la calidad de los productos que se compran de cara a adquirir bienes más saludables y duraderos.
  • Obtener información acerca de las repercusiones sociales y medioambientales de los bienes y servicios. Utilizando productos y servicios de comercio justo y ético.
  • Valorar que las empresas fabricantes y distribuidoras del producto sean ambientalmente responsables y procedan de la economía social y alternativa.
  • Elegir productos que su funcionamiento y mantenimiento requiera el mínimo consumo de recursos naturales como agua, energía… y la mínima generación de residuos y emisiones

A continuación, y aunque seguramente existen muchos más, te relacionamos una serie de aspectos y consideraciones a tener en cuenta a la hora de evaluar la responsabilidad y sostenibilidad de nuestros proveedores actuales y potenciales:

  • Cumplimiento de todas las normas de protección medioambientales locales e internacionales aplicables, incluyendo la gestión final, transporte y almacenamiento de residuos, sustancias tóxicas y desechos peligrosos. Como cliente de los proveedores, estás en tu pleno derecho de exigirles pruebas de que tanto ellos como su empresa están cumpliendo con la legislación vigente.
  • Compromiso con la reducción de gases de efecto invernadero y otras emisiones a la atmósfera (calcula su huella de carbono), con el control y reducción de agua y energía, y con la mitigación de la contaminación acústica y la contaminación de suelos.
  • Si tiene implantada la gestión responsable de sus residuos y realiza actuaciones en el marco de la Economía Circular.
  • Si prioriza la selección de materias primas de fuentes sostenibles y usa material reciclado frente al no reciclado.
  • Si utiliza envases y embalajes sostenibles, con aplicación de técnicas de ecodiseño de los mismos
  • Si un porcentaje significativo de la energía que consume proviene de fuentes renovables
  • Si dispone de una flota de vehículos ecoeficientes y sostenibles
  • Si en el etiquetado indica los componentes de los productos y sus impactos sobre la seguridad y salud y pone a disposición del cliente/comprador orientación acerca del desecho del producto.
  • Si dispone de Certificados ecológicos y/o sostenibles y procedentes de comercio justo o que acrediten buenas prácticas medioambientales
  • Si el proveedor tiene un Sistema de Gestión Ambiental certificado (v.g ISO 14001, EMAS…)
  • La cercanía: elegir proveedores dentro de un ámbito geográfico cercano significa rebajar costes en transporte y combustible y, lo que es más importante, rebajar la huella de carbono. El transporte es uno de los grandes responsables de emisiones contaminantes. Elegir proveedores basándose en la proximidad es un modo más de reducir las emisiones de CO2 y apostar por la sostenibilidad. Por otro lado, de esta manera estamos favoreciendo la economía del entorno en el que desarrollamos nuestra actividad.
  • Una cadena de suministro corta: Escoger a proveedores que garanticen una cadena de suministro corta, sin intermediarios innecesarios que puedan poner en riesgo la justa remuneración de los productores primarios. Por otra parte, cuantos menos intermediarios haya para hacerte llegar un producto, menos costes tendrás que pagar por él y menos especulación se hará que lleve a realizar acciones que dañen el planeta, optimizando además, la rentabilidad en las empresas.
  • La utilización de vías de transporte alternativas al transporte por carretera.
  • Si el proveedor cumple la normativa laboral con sus trabajadores. Se han de considerar todas las cuestiones que tengan que ver con el respeto a condiciones laborales establecidas en el entorno de trabajo: jornada laboral, turnos, compensaciones y beneficios sociales para los empleados, formación y promoción del talento interno, negociación colectiva….
  • Una especial consideración del cumplimiento de la normativa relativa a la prevención de riesgos laborales (PRL): entrega (en su caso) EPIs y realización de formación sobre Salud y Seguridad a todos sus empleados.
  • La existencia de medidas de conciliación y beneficios sociales
  • Si cuenta con un Plan de Igualdad y fomenta la igualdad de oportunidades con objetivos y medidas formales
  • Además, se han de considerar todas las cuestiones que tengan que ver con el respeto a los derechos humanos como por ejemplo el trabajo forzoso o infantil
  • Se debe considerar la relación que el proveedor tiene con la sociedad. Se han de considerar, entre otros, aspectos como el impacto negativo o positivo en las comunidades en las que opera y la vinculación con el entorno, etc.
  • Si dispone de alguna Certificación en un Sistema de Gestión de la Responsabilidad Social Corporativa (ISO 26000, IQNet SR10, SGE21,…)
  • Si las compras de los proveedores provienen en un elevado % de proveedores locales.
  • Si prioriza la contratación con empresas sociales.
  • Si el proveedor colabora con instituciones públicas para apoyar a la comunidad en la que opera.
  • Si el propio proveedor incluye a su vez criterios ESG en sus procesos de compra.
  • Se deben considerar todas las cuestiones relacionadas con la corrupción y el soborno, la publicidad y el marketing responsable, la competencia desleal, las condiciones para recibir obsequios y regalos, las medidas para una fiscalidad responsable, etc.
  • Valorar si el proveedor pone en marcha medidas para luchar contra la corrupción y el soborno
  • Si dispone de certificados éticos. Dependiendo de la actividad y del tipo de proveedor, se pueden exigir diferentes certificaciones
  • La transparencia: los consumidores son cada vez más exigentes en este sentido, y es algo que afecta directamente a los proveedores. A la hora de elegir el proveedor, es importante tener en cuenta su nivel de transparencia respecto a la huella de carbono o hídrica, al tratamiento de residuos, al nivel de reciclaje o a cualquier iniciativa responsable y/o sostenible que tomen.

Aunque si se tienen en cuenta estos aspectos, el proceso de selección de proveedores puede ser complejo, es conveniente tener en cuenta que:

  • Lo ideal es establecer un sistema de indicadores de sostenibilidad de proveedores y transmitir nuestro sistema de evaluación a todos ellos. La comunicación de dichos criterios permitirá a nuestros proveedores conocer de primera mano nuestros requisitos y los principios que definen nuestro norte en materia de sostenibilidad empresarial. De esta forma, irán asimilando nuestras decisiones y adaptándose en función de ellas.
  • Existen herramientas que permiten evaluar el nivel de compromiso con la sostenibilidad de cada proveedor mediante la aplicación de determinados parámetros. Una ponderación de dichos criterios nos permitirá dar mayor o menor peso a cada proveedor e identificar mejor nuestras necesidades.
  • Cuando se trata de una empresa de nueva creación, esta elección estratégica puede resultar medianamente fácil. La dificultad llega cuando se trata de evaluar a proveedores con los que se trabaja desde hace tiempo y no cumplen con esos criterios de sostenibilidad. En ese sentido solo cabe confiar en que el proveedor modifique su línea de actuación o buscar otro, si no lo hace. Este será un cambio radical e importante que debes dar si quieres alcanzar los objetivos que te has marcado como empresario hacia una producción más sostenible.

A título de ejemplo, te puedes descargar el siguiente CUESTIONARIO, que pretende ser una referencia en la que apoyarse y que deberá ser adaptado a cada situación concreta (necesidades, actividad…) eliminando y/o añadiendo preguntas para al final ver en qué posición se encuentra la empresa en su evaluación como proveedor sostenible.

Por otra parte, y aunque corresponden a empresas de una cierta dimensión, puedes visualizar, como orientación, las siguientes políticas respecto al aprovisionamiento sostenible: